Los hutong es el nombre que se le da a unas calles muy particulares de la capital China, son muy estrechas y dan a un patios interiores donde se tiende la ropa o se realizan otros quehaceres diarios.
Los baños son comunitarios. Durante mis paseos por los hutongs pude ver como un perro se quedaba en el exterior de la puerta del baño y gruñía a todo aquél que quería entrar, hasta que el dueño salió.
Los hutongs son centenarios, que se construyeron en antiguas dinastías Chinas, pero desgraciadamente a raíz de los Juegos Olímpicos de 2008 se destruyeron muchos de ellos. Todavía se pueden visitar algunos hutong auténticos, pero están desapareciendo de forma acelerada y con ellas una forma de vida. Algunos de los hutong existentes están orientados al turismo, perdiendo de esta manera parte de su esencia de barrio.
Sus calles presentan gran actividad y los vecinos tienen mucho contacto entre ellos. Son calles muy divertidas para visitar y perderse en ellas, relativamente fácil porque la mayoría de hutongs, los más modernos, están construidos sin ningún plan, las sorpresas se suceden en cada esquina. Podéis ver todas las imágenes a pantalla completa en el apartado de Fotografías.